El agua dulce es el recurso más importante para la humanidad y está presente en todas sus actividades sociales, económicas y ambientales. Es el requisito para la existencia de vida en nuestro planeta, un factor que influye en el desarrollo social y tecnológico, une fuente posible de bienestar o de miseria, de cooperación o de conflicto.
El agua dulce es esencial para la vida y no hay suficiente para el mundo en este momento. ¿Por qué, y qué podríamos hacer? Christiana Z. Peppard expone las grandes cuestiones de nuestro problema mundial del agua. Y, no, duchas más cortas no son la respuesta.
Con el fin de garantizar el suministro de agua, se deben proteger los sistemas hídricos vulnerables, reducir el impacto de desastres como las inundaciones y las sequías, garantizar el acceso al agua y sus servicios, y gestionar de forma adaptada y equitativa los recursos hídricos.
La UNESCO intenta que los países gestionen sus recursos hídricos de forma sostenible por medio del Programa Hidrológico Internacional, su liderazgo en el Informe de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos en el Mundo, el Instituto UNESCO-IHE para la Educación relativa al Agua, con sede en Delft (Países Bajos), los más de 20 centros de investigación repartidos por todo el mundo y las Cátedras UNESCO relacionadas con el agua.